1962 Emory Roadster especial
Los forajidos del Porsche 356 de Emory son casi tan buscados como los originales. La prueba está a la espera, que se sitúa en unos dos años en el momento de escribir este artículo. Esto significa que cada Emory es tan único como su propietario, y cada uno es una creación personalizada en el verdadero sentido de la palabra. El 1962 356 que se muestra aquí toma el aspecto minimalista característico de Emory y lo combina con las señales de estilo clásico de los autos de carreras Porsche de la época. Los espejos de bajo perfil montados en el guardabarros y la eliminación de cualquier trabajo brillante se combinan perfectamente con la pintura bronce. El interior tiene asientos deportivos de carreras de aluminio tapizados en cuero negro y marrón, medidores mínimos y nada más que una extensión ininterrumpida de acero para el tablero. La verdadera magia está escondida en la parte trasera, donde reside el cuatro piso Emory-Rothsport. La espera puede ser larga, pero cada minuto vale la pena.
