Concepto Cadillac Sollei
En 1957, uno de los 400 Cadillac Eldorado Brougham fabricados ese año costaba 13.074 dólares, más de 4.000 dólares más que un Rolls-Royce Silver Wraith nuevo. Ese fue el último Cadillac construido a mano hasta el Celestiq, cuyas entregas están programadas para comenzar más adelante en 2024. Para demostrar que el Celestiq no es algo único, Cadillac lanzó el concepto Sollei, convirtiendo el Celestiq en un convertible 2+2. El nombre proviene de "sol" y "lei" de ocio, con un interior que se centra en la tranquilidad. Quitar el techo y las puertas traseras del Celestiq le da al Sollei la presencia de los grandes turismos del pasado, con un tratamiento de luces traseras LED simple pero elegante que aprovecha al máximo las líneas del automóvil. El Sollei usa pintura Manilla Cream aplicada a mano, un color que apareció por primera vez en los Cadillacs en 1957, con llantas cepilladas de 23 pulgadas en plata y adornos en oro rosa. El interior está tapizado en cuero y una exquisita carpintería, con los respaldos de los asientos, las costuras y las perforaciones en cuero Nappa que emulan un motivo de rayos de sol. Entre los asientos traseros se encuentra un refrigerador integrado con una puerta de vidrio eléctrica, que contiene una jarra y vasos de cristal hechos a medida. Si bien el Sollei es un concepto, no se sorprenda al ver una producción limitada en el futuro cercano.